Día 24: Ninh Binh

Arrancamos a las 8:30, lo justo para desayunar en nuestro esplendido homestay, que en España sería un bungalows de 3 estrellas de madera. Desayuno incluido, simple, pero pretender más es exprimir una piedra. Terminamos, Sai pide una moto y antes de las 10 ya estamos explorando el territorio.

Arrancamos a las 8:30, lo justo para desayunar en nuestro esplendido homestay, que en España sería un bungalows de 3 estrellas de madera. Desayuno incluido, simple, pero pretender más es exprimir una piedra. Terminamos, Sai pide una moto y antes de las 10 ya estamos explorando el territorio.

A esta zona le dicen el Ha Long de tierra, por contar con una orografía que empezamos a ver en el norte, en territorio montañoso, es la misma que Ha Long Bay pero en el mar, y en esta zona es lo mismo, pero en tierra y rodeada de lagos. Vamos con nuestra moto directos a hacer la ruta por los lagos de Trang An, patrimonio de los hominidos sin pelo.

Al llegar vemos algo equivalente a nuestros centros de interpretación, bla bla bla… Espacios grandilocuentes con muchas fotos, combos de mil cosas que no quieres hacer, y que se han inventado, donde puedes sentir como sabía un brote de bambú hace 1000 años… No puedo criticar… España está llena de sitios así y nos sentimos orgullosos… a veces lo merecen y con creces, pero a veces es más el resultado de crear un espacio de ficción atractivo para el turimo que otra cosa…

Pasamos de los Mc Combos y optamos por lo que teníamos en mente, recorrer la zona en bote por el lago. Hay distintas opciones… mas de lo mismo: Tengo 10 cositas y las vendo en tres packs, en cada pack una combinación distinta y parece que ofrezco más… Nosotros a por la ruta 1, 9 cuevas y 4 templos o algo así.

Son 3 horas y media… se me encoge el alma al ver que junto a una pareja italo-portuguesa, nos meten a nosotros en una barquita, y que el motor de esa barca es una mujer que va a remar para nosotros…

El calor es sofocante, no hemos hecho más que empezar y solo pienso en por qué me he metido aquí dentro… Los humanos somos lo peor, pero mama natura es todo amor, y el hastío inicial se me pasa en cuanto empezamos a meternos por estos laberintos, igualitos a los Ha Long, pero ahora rodeados por lago… pero la cosa mejora al empezar a entrar en cuevas con la barca… algunas tienen 1 km… el techo está tan cerca que pese a la pericia de la barquera, muchas veces tenemos que irnos moviendo, encogiendo un hombro o agachando la cabeza para no almorzar estalactitas…

Algunos pasajes dan acceso a «habitaciones» ciegas, a las que solo se puede llegar por gruta. Cada cierto tiempo, llegamos a un templo, que están dispersos por esta maravillosa arquitectura divina… no me extraña para nada la elección de los sitios, salvo porque sería incapaz de mditar a la par que sudo de abajo arriba, de una manera que parece que acabo de salir de la ducha, pero vestido.

Al llegar a algunos templos, nos bajamos y caminamos. A veces hay que subir un sin fin de escaleras, que al coronar podrían ser el naciente de un nuevo río que soy yo mismo. No es posible sudar dos veces tu volumen, pienso, pero no existo.

Las 3 horas y pico son una continua sucesión, tirando al exeso de lo que hemos visto ya, pero en este caso, no es una exploración directa y genuina de la naturaleza, me siento on rails… me empieza a cansar…

La salida es tan larga como la entrada… boqueo primero, luego cabeceo y finalmente duermo fugazmente pero duermo, de hecho tengo sueños en los que me sumerjo en la deliciosamente fría agua del Atlántico…

De damos propina a la mujer, que se gana su sustento con ello, pero que tampoco tenía culpa de tipar con Sai y conmigo… menua cruz…

Picamos algo, en el primer garito dentro del complejo según nos bajamos. Los 14€ que pagamos deben ser el equivalentes a un almuerzo en el Loro Parque. Cafes en vena, y hamburguesa de cabra a los cuatro vientos.

Salor de allí, montarnos en la moto y que nos de el aire nos revive por fin. Que coño hacemos? Vamos a la que fue la capital del primer estado independiente de Vietnam (968) Hoa Lu.

Aunque haya poca cosa, estar en un sitio así suele molar… pero es que es poca cosa y está tan dispersa, que no hagas como nosotros, que pensamos que no podíamos entrar en moto… Se me ocurre que es como visitar las ruinas de Madrls y que solo quedara en pie el Bernabéu, El Matadero y Moncloa… (estoy exagerando)…

No siento la historia en las piedras y caminar sin fin bajo este bochornos es insufrible… y llega ya el momento de la reflexión… que pasa? estas cansado? tienes mal día? esta zona no mola? o que pasa? Como siempre intentaré ser tan franco como objetivo, lo cual todos sabemos que es imposible.

Posibles razones:

1. El cansancio, el sofoco o cualquier tipo de incomodidad, afectan profundamente a la sensibilidad y receptividad.
2. Llevamos 3 semanas de viaje, objetivamente vamos perdiendo cierto nivel de interés.
3. El paisaje que nos fascinó de Vietnam, es siempre el mismo, montaña, mar o lago.
4. Nos sentimos viajeros y rehuimos el turismo, por lo que hemos ido de mejor a peor.

Pliego de descargos:

1. La belleza puede con todo, en viajes variados no te aburres nunca.
2. Si tienes tiempo y sientes hastío, cambia totalmente de area o incluso país, ahora mismo estaría tan ilusionado como al principio.
3. Del mismo modo, si tienes tiempo y has encontrado un sitio donde eres feliz, prolonga la estacia todo lo que te pida el cuerpo.
4. Un viajero no es más que una forma temprana de turista, no olvides que tu le allanas el terreno al turista, así que eres parte del problema que tanto criticas.

Sai y yo, nos vamos de allí dande al coco, tratando de determinar como cerrar un viaje que ha arrancado en el top 5 desde, de la mejor manera posible. Para empezar hemos decidido romper con lo que hay o no que ver por aquí… mañana nos montamos en la moto y nos vamos a flipar por esos rincones exquisitos que se esconden a si.ole vista. La moto es un puntazo, para empezar aligera la carga de calor con ese pedazo de ventilador que se pone en marcha en cuanto arrancas; por otra parte, aunque vayas tranquilín, puedes explorar sitios que de ninguna otra manera podrías.

Lo siguiente que hemos decidido es irnos a Hanoi pasado mañana y dedicarle 4 días. Una gran ciudad, y más una vibrante y divertida como Hanoi, sospecho que nos regalará momentos especiales que atesorar en el recuerdo.

Buehhh… después de todo eso y volver hasta el hostal, nos metimos en la piscina y nos pillamos unas birras. Tan simple y tan efectivo, todo cambia de color. Al rato llega la parejita vasca y se meten en la piscina, nos ponemos a alegar de tooo. Otra pareja del hostal se suma, y al rato descubrimos que el es canarión y ella cántabra. Nos enredamos tanto hablando de viajes (en parte porque ambas parejas van hacia la zona que nosotros hicimos primero) que terminamos saliendo los 6 a cenar donde anoche comimos el pato asado.

Pasamos casi 3 horas cenando. Repetimos pato y pedimos cabra, nos fascinó el punto especiado, aunque no se reconozca el sabor a cabra.Junto con eso, unos rollitos. Las otras parejas tambien piden pato y otros platos. Hablamos principalmente de viajes, pero la reflexión de este relato también fue parte de los temas…

Nos hacemos viejos. Los vascos estan finalizando los 20 y tantos. Los otros se aproximan a los 40. Sai oteando los 50 y yo este año a por 51… En lo que hablamos no siento edades, son gente madura y majetes, pero en 9 años (a la vuelta de la esquina?) ya beso los 60… no me veo haciendo en moto para entonces 750 km en moto por el norte de ningún lugar… ojalá me equivoque, pero tampoco lo persigo, ni lo forzaré… iran viniendo viajes cada vez más estáticos… Presto mucha atención a sitios donde creo que pudiera pasar dos o tres semanas, gozando de la vida, en un entorno estimulante…

Podría reutilizar la frase de: Siempre nos quedará París… pero yo apostillaría: … sí, pero para el final… Ahora que podemos, caña al cuerpo, incluidas las miserias cuando toquen, que ya habrá tiempo de mirar desde el asiento de un barquito a Paris… desde el Sena…

Besitos a todos…
… desde este lado del mundo mundial : )