Día 8: Bukit Lawang – Berastagi

Nos levantamos a las 7 y cuarto. Ayer dejamos casi hecha la mochila por la tarde, de modo que bajamos del tirón, ya con ellas. Último desayuno en Bukit Lawang. Tortilla, tostadas, zumo de maracuyá (markisa, en indonesio) y cafecitos. Por cierto, da gusto pedir café aquí, el cafe en Sumatra es francamente bueno… salvando los pozos, según donde lo pidas.

Fitri se toma su tiempo en preparar el desayuno y otro tanto en hacer las cuentas. Cuando estamos listos ya son las 8:30 y el chofer de la van compartida en la que nos vamos, y nos está esperando empieza a meternos prisa. Nos despedimos afectuosamente de Putra y Fitri, el sitio no era de calidad, pero nos han tratado muy bien.

Según nos montamos en la furgonetas, un chico nos pregunta si somos españoles. Daniel se llama. Hablamos un rato con él. Es valenciano, y hace una ruta similar a la nuestra, aunque el va a estar viajando 2 meses. Al rato nos relajamos cada uno en su asiento… el viaje dura entre 3 y 4 horas, así que con calma. La van no va llena, a parte de nosotros 3 viene una pareja de francesas. Dormitamos, repaso mi indonesio, vemos el paisaje pasar frente a nosotros…

El paisaje no tiene mucha variación… plantaciones de aceite de palma… es mejor que la deforestación total y luce bonito… si no sabes nada, te puede gustar, pero se come la la jungla año a año y toda su diversidad. Me está entristeciendo un poco la suciedad, basura. En otra partes de Indonesia he visto mas preocupación por evitar la basura descontrolada (aunque siempre terminas viendo aberraciones), pero aquí me esta resultando más fácil encontrar acumulación de basuras. Todo el trayecto es una sucesión de casuchas, autoconstruidas, de su madre y de su padre. Con diseños clásicos o de lo más extravagante. Pero siempre con punto semi derruido.

La ruta nos acerca hasta el mismo borde de Medan. Se nota claramente por el tráfico brutal y porque incluso vemos a lo lejos los primeros edificios en los muchos días. El último tercio del trayecto nos lleva hasta el borde del valle en el que hemos estado todos estos días, las montañas se alzan ante nosotros y empezamos a subir. Creo que la altitud de Berastagi está en torno a los 1300 metros… cosa que notamos nada más llegar… hace casi frío.

Dani y las francesas se han bajado bastante lejos del centro, nosotros estamos casi en el centro. Hotel 3 Berastagi. El taxi nos deja en la puerta. Son las 13:30. El hotel se ve raro. Entramos por una rampa y llegamos a una especie de patio destartalado, en el que damos vuelta durante mas de 2 minutos antes de ver como entrar al hotel…. uy uy uy uuuuuuuy!!! Esto no pinta muy bien… pero es tal la cura de espanto que traigo de Bukit Lawang, que casi me da la risa. Aquello parece haberlo construido un arquitecto desquiciado, y luego lo destruyeron todos sus colegas del manicomio! Por fin encontramos una escalera oculta y llegamos a la planta base. Seguramente hubo un tiempo mejor para este hotel, hoy es una cochambre. Hacemos checking y nos llevan a la habitación. Wow… cuanto espacio, es lo primero que pienso, después de no poder estar los dos de pie en la habitación de Bukit.

Vamos al baño de cabeza, que llegamos con cierto apuro. Esperabamos ser abordados, con ofertas mil, de actividades varias en la zona. Pero la disfuncionalidad imperante llega hasta ese punto. Soltamos amarras y nos lanzamos a la calle a ver si nos situamos de cara a las actividades que queremos realizar los proximos días. Son 3 noches por delante, 2 dias completos. Básicamente, queremos dedicar un día a visitas generales, cascadas, una colina, poblados, mercados, etc y otro a hacer el trek al un volcan cercano.

Flipamos con la ciudad. Es un p*t* caos. El encanto no pasó por aquí, durante los 7 dias esos que se tomó Zeus para modelar este mundo loco. Típicas aceras, por las que parece que ha pasado una manada de elefante, adelante y atrás… raro es encontrar una baldosa entera. Recorremo calle abajo. Mezcla de tiendas, ferreterias y warung (restaurante sencillo local). Recorremos calle arriba. Nos encontramos a Dani y las francesas. Compartimos información práctica. El bus para el volcan, etc.

Tratamos de dar con algun sitio con información turistica, sea una agencia o lo que sea. Busco en Google Maps. Seguimos como tontos la ruta hasta meternos en una zona residencial, damos tumbos sin encontrar ni agencia ni alquiler de motos. Según salimos damos con la oficina de turismo, que está junto al mercado. Resolvemos todas nuestras dudas. Toca comer.

Volvemos a la calle principal. Nos encontramos en un cafe a la pareja de catalanes de luna de miel que conocimos al final del trek en Bukit Lawang. Parece ser que tienen en un café cojonudo. Están con otro español, David, que ya va por el segundo café. Nos dicen han comido en uno cercano. Nos acercamos, pero ya son las 14:30, y en los mostradores ya no hay tanta variedad de platos. Decidimos mirar en otro que nos pareció mas surtido. No queremos dar mas tumbos y comemos en este otro. Pollo, chipirones, verduras y arroz, mas las chayotas y el sambal que incluye.

Una vez comidos volvemos al café, en busca de eso mismo. Los chicos se han ido pero sigue allí David. Lo saludamos y nos sentamos en otra mesa, pedimos nuestros cafes. Al rato David que ya se va se acerca a despedirse, pero nos liamos a hablar y pasamos un rato así, hasta que atrapados en la conversación, nos dice que tiene que ir urgente al baño del hostel, que ahora viene.

Al rato viene y ahora me toca a mi apretón. Vuelo al alojamiento y llego por los pelos. Cuando vuelvo la conversación ya está en su auge. Resulta que David también es profe y ya están metidos en materia. La coversacion vuelve a los viajes. David ha viajado bastante y compartimos mil anécdotas mochileras.Nos da la noche. Unas cervezas? Pregunta David… dale! Yo he visto que en una tienda tienen, pero no vamos a hacer botellón… A Sai se le ocurre que tal vez en un chino que hemos visto aquí al lado. Lo clava. Caen varias rondas de cervezas y la conversación profundiza más y más en nuestras vidas. Es curioso, si seguimos así un par de horas más podemos saber más los unos de los otros que lo que puedo saber de otra gente que puedo conocer desde hace años.

David manda un mensaje a los recién casados y aparecen por el chino cuando ya hemos pagado y estamos a punto de salir. En cualquier caso vienen a despedirse ya que mañana cogen rumbo a Java. Volvemos al cafe a cenar. Dejo a Sai y David en su conversación y me centro en el diario, porque si no me dan la uvas y no quiero.

Ahora mismo son las 23:10 y le han dado varias vueltas al calcetín del magisterio. Lo voy a dejar aquí para volver a integrarme en la conversación, que en breve nos recogeremos.

Dicho lo cual… Selamat malam!!!