Nuestro viaje a Indonesia en 2020 comenzó en las Islas Kei, donde las playas de arena blanca y aguas cristalinas nos dieron la bienvenida al paraíso. Desde allí, exploramos la autenticidad de los pueblos locales, donde la gente nos recibió con una calidez que hizo inolvidable cada encuentro. Las jornadas se llenaron de rutas improvisadas, conversaciones con lugareños y atardeceres mágicos sobre el mar.

El siguiente destino fueron las Islas Banda, famosas por su historia como el centro del comercio de especias. Navegar entre sus aguas fue como retroceder en el tiempo, con cada isla ofreciendo una mezcla de belleza natural e historias fascinantes. Aquí, las profundidades marinas nos regalaron uno de los mejores momentos de snorkel, con corales vivos que contrastaban con el daño evidente en otras áreas.

Finalmente, llegamos a Raja Ampat, el broche de oro de nuestra aventura. El esplendor de sus arrecifes y la vida marina nos dejó sin palabras. Este santuario del buceo nos recordó la riqueza y fragilidad de los océanos. Las playas solitarias y los días descalzos completaron una experiencia que parecía suspendida en el tiempo, un cierre perfecto para este viaje inolvidable.

Indonesia 2020 fue más que un recorrido por sus islas; fue una inmersión en su diversidad cultural, su naturaleza impresionante y los pequeños momentos que hacen de viajar un placer incomparable. Mochilas al hombro, nos llevamos mucho más de lo que dejamos, prometiendo regresar algún día a este archipiélago de maravillas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *